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Argentina Necesita Profundizar la Empresarialidad

5 octubre, 2019 | Revista nº 23

La creación de nuevas empresas, debe ser para un país que pretende ser desarrollado, una política de estado. Es necesario contar con legislación que dé el marco regulatorio para el fomento emprendedor. Hoy contamos con una Ley Nacional de fomento al capital emprendedor, que por su concepción quedó circunscripta a cuestiones únicamente de financiamiento qué, por la situación financiera por la que atraviesa nuestro país, pierde continuidad y efectividad.

Desarrollar políticas en post de fomentar la empresarialidad, significa contar con instrumentos, leyes, programas y sobre todo financiamiento que promuevan la creación de nuevas empresas que generen puestos de trabajo. El Estado puede generar programas de financiamiento, pero será más efectivo si fomenta y promueve que el sector financiero destine fondos para apoyar a emprendedores con tasas acordes a las necesidades de un nuevo emprendimiento.

Ésta ley además toma un aspecto del emprendedor, que si bien es de suma importancia para la creación de riqueza, por ser orientada únicamente a emprendimientos innovadores o tecnológicos, deja de lado un sinnúmero de emprendedores que por la tipificación de su emprendimiento, no son alcanzados y por ende no cuentan con un apoyo razonable desde el Estado.

Si ahora nos referimos a la provincia de Buenos Aires, tenemos que recordar que ésta es pionera en la creación de políticas de apoyo a emprendedores. A principios de los ’90, se trae un modelo de incubación de empresas del País Vasco, para lo cual se crean una serie de incubadoras municipales. Con el tiempo, se incorporan las universidades, promoviendo en su ámbito, la formación de emprendedores universitarios. En la CEPBA, nos tocó ser parte de una tercer ola en éste sentido. Donde se articula el saber (desde las universidades), el apoyo estatal (con el Estado Provincial y Municipal) y la visión empresaria (transmitida desde la CEPBA). En todos estos años hemos aprendido, que sin el apoyo del Estado no se puede promover el desarrollo emprendedor, porque solemos trabajar con personas que descubren su vocación emprendedora en éstos Programas.

Desde hace tiempo nada de eso existe, y necesitamos volver a generar una política activa que fomente la empresarialidad y cree más y mejores empresas. Porque ahí podremos decir que cuantas más empresas existan en una región, mayor será la contribución de éstas al desarrollo regional.

 
voz-empresaria
 

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